Impresionante, Toledo en 1 día desde Madrid.
En esta ocasión vamos a visitar Toledo en 1 día desde Madrid. Un día que os dejara un buen sabor de boca. Repetiréis seguro.
Tanto si llevas varios días en Madrid y te apetece cambiar un poco de aires, como si viajas con la intención de hacer turismo por España en Toledo encontrarás un lugar tranquilo, con una riqueza cultural excepcional que te recargará las pilas y te hará disfrutar de tu visita.
Para llegar a Toledo escogimos el tren. El trayecto Madrid Toledo y viceversa dura poco más de media hora. Un viaje ideal para visitar Toledo en un día. Hay trenes desde las 6:30 am pero los monumentos abren más tarde. Aún así, podéis comenzar la visita con un paseo temprano y evitar los rigores del clima.
Antes de visitar Toledo y sus impresionantes monumentos y museos informaros de los horarios, hay días que son gratuitos, otros están cerrados o tienen horarios restringidos. Es importante planificar la visita para no agotaros. Hay una pulsera turística que os puede resultar económica.
Son muy interesantes las visitas nocturnas (aunque necesitaréis pasar la noche en Toledo) y los free tour, os dejo dos enlaces a las opciones que da la empresa Civitatis.
Aunque en Toledo lo más interesante desde mi punto de vista es callejear y disfrutar de las vistas y paisajes que ofrecen los muchos miradores de la ciudad. Visitar algún museo o monumento también pero a partir del segundo yo me saturo y no puedo admirar las maravillosas obras que ofrece Toledo. He de decir que esto me pasa en todos los lugares. Prefiero ver poco y en calma que tomar una foto de paso. Es una escusa para volver.
Evidentemente, Toledo da para unos cuantos días si queremos aprovechar las maravillas que tiene al 100%. Cómo vamos en el día he trazado una ruta que cruza la ciudad y os detallo algunas de los monumentos que podéis visitar. Son muchos no os dará tiempo en un solo día a visitarlos todos pero como hay para todos los gustos seleccionar según los vuestros.
Dónde comer
En muchos conventos las personas que lo habitan suelen hacer dulces que son un placer para los sentidos, especialmente para el gusto. Almendrados, mazapanes, marquesitas, anguilas, castañas, empiñonadas, gaitanitas, corazones almendrados de San Antonio, los roscos de zumo de naranja y los bombones de mazapán bañados en chocolate crujiente, perrunillas, flores de cardamomo, yemas, bizcochos, magdalenas y vinos y licores. En fin un festival de dulces. Probadlos y ya me contaréis.
Las recetas de estos dulces tienen cientos de años, herencia de todas las civilizaciones y culturas que han pasado por esta ciudad.
LLamad a la puerta del convento y os atenderán amablemente. También hay pastelerías pero es más interesante y artesanal comprarlas directamente de la mano de la artesana o artesano.
El vermut lo tomamos en «El 10 de Santo Tomé», se llama como la dirección. Un buen sitio para tomar un refrigerio, fresquito y se come bien. Dan tapa, como es de esperar.
Para comer en Toledo hay muchas opciones. En esta ocasión escogimos un vegetariano «Madre Tierra» no estuvo mal. El local amplio y fresquito. Si vais de picnic, hay muchos parques. El «Parque de la Vega» tiene mucha sombra y fuente. Está frente a la Puerta de la Bisagra.
Os dejo una ruta para que os sirva de guía en vuestra visita a Toledo, recordad, a lo largo de la ruta hay todo tipo de tiendas, restaurantes, bares, parques, monumentos y rincones maravillosos para disfrutar. La mayoría os los he mencionado. No os dará tiempo de verlos todos en un día, seleccionar lo que más os interese ver y volved.
Ruta por Toledo
Lo primero que vais a ver es la belleza de la estación de tren. Observad a vuestros compañeros de viaje con la boca abierta y el móvil en la mano intentando conseguir la mejor instantánea.
Después de salir de la estación para llegar al centro histórico de Toledo girar a la derecha y subid por el paseo de la Rosa hasta el Puente y la Puerta de Alcántara. Por el camino, las vistas de Toledo son maravillosas.
Tras atravesar el Puente de Alcántara nos dirigimos a visitar la Sinagoga de Santa Maria La Blanca. Para llegar hay que cruzar todo el casco antiguo por lo que llegar nos costó un rato.
Sobre todo por la cantidad de cosas que visitamos de camino y por lo agradable del paseo. Las estrechas calles de la ciudad ayudan a combatir el clima.
Una vez cruzado el Puente de Alcántara nos adentramos por la puerta del mismo nombre que por la derecha nos llevará al mirador y, si giramos a la izquierda justo antes podremos alcanzar el Museo de la Santa Cruz.
El Museo de la Santa Cruz está ubicado en un antiguo hospital renacentista, el museo alberga una colección que abarca desde el arte medieval hasta el siglo XX. Entre sus principales atractivos se encuentran obras de El Greco, destacadas piezas de arte sacro, tapices y cerámicas. El edificio en sí es una joya arquitectónica con su impresionante claustro y escalinata.
Un poco más adelante entramos en la Plaza Zocodover por el Arco de la Sangre que recibe del nombre de una ermita de la Santa Cruz que también se conoce como de la Sangre. No esperéis grandes masacres o linchamientos varios que también podría ser.
Entrando en Toledo
La Plaza Zocodover (del árabe “mercado de las bestias”) merece una pequeña pausa, llena de locales de restauración y un mercadillo que se mantiene desde 1465, los martes y que lleva el mismo nombre «Martes».
Desde la plaza tomamos la calle Comercio hasta la Plaza de las Cuatro Calles. De estas continuamos por la Calle del Hombre de Palo. Al final de esta calle encontramos el Arco de Palacio que a la salida, por la derecha nos deja en la calle Trinidad. Un lío de calles como podéis ver.
Al pasar por esta calle dejamos el Archivo histórico Provincial de Toledo, el antiguo convento de las Dominicas. Justo en la esquina giramos a la derecha por el Callejón de Jesús y María que nos deja frente a la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales. Por la derecha llegaremos a la Iglesia de los Jesuitas. Nosotros, en nuestra ruta, iremos por la izquierda.
Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda de Toledo
Al llegar a Museo de la Inquisición si giramos a la derecha por la Calle Gordo llegaremos al Monasterio de San Clemente y al Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda. El desvío es poco pero merece la pena la visita.
El museo se encuentra instalado en la Iglesia de San Román, uno de los edificios más singulares de la arquitectura del siglo XIII de la ciudad de Toledo. Entre sus fondos se encuentran muestras arqueológicas de los siglos VI, VII y VIII.
Para volver a la ruta si os habéis desviado podéis hacerlo desde la Plaza de Santa Cruz y la travesía de Santa Cruz. Os animo a salir de la ruta y callejear un poco. Encontraréis muchas sorpresas.
La ruta que hemos dejado en el Museo de la Inquisición (vaya museo, por cierto) continua por la Calle Bulas. Después de pasar la Casa de las Cadenas, una especie de corrala toledana, la Travesía de Santa Cruz vuelve a la ruta.
Al final de la calle podemos ir a la derecha desde donde podemos obtener una fantástica vista del Monasterio de San Juan de los Reyes Católicos. Encargado por ellos en 1476 es uno de los mejores conjuntos del gótico hispano-flamenco y uno de los imprescindibles para ver en Toledo.
A la izquierda, tomamos la Cuesta Bisbís inmediatamente a la izquierda. Nos dejará en los Baños Judíos del Ángel. A la derecha por la calle de Santa María la Blanca llegaremos a la sinagoga que alcanzaremos por el Callejón de los Jacintos.
Sinagoga de Santa María la Blanca
La Sinagoga de Santa María la Blanca ya no se utiliza para el culto ni judío, ni cristiano aunque sigue siendo un lugar de referencia para ambas culturas.
Al salir de la sinagoga por la izquierda, por la calle de los Reyes Católicos, llegaremos en poco tiempo a la Sinagoga del Transito que también es un museo.
Siguiendo unos metros, el Museo del Greco. Un lugar muy agradable alberga su colección privada y otras obras. Además es la casa donde, según se cuenta, vivió el pintor. Por cierto, tiene un jardín super fresquito.
Vamos a terminar esta ruta en la Catedral Primada de Toledo para llegar, seguir por la Calle de los Descalzos para llegar a la Iglesia de Santo Tomé. En esta iglesia se encuentra una de las obras más representativas de El Greco «El Entierro del Señor de Orgaz».
Después, tomar la Calle del Taller del Moro, luego a izquierda, para pasar por la Iglesia de El Salvador y la calle del mismo nombre. O a la derecha por la Calle de Santa Ursula y la Calle San Marcos para llegar al mismo sitio, la Catedral.
La Catedral Primada de Toledo
La Catedral Primada de Toledo, también conocida como la Catedral de Santa María, es uno de los más grandes ejemplos del gótico en España. Construida entre los siglos XIII y XV, destaca por su impresionante fachada, la monumental Puerta del Perdón y la torre campanario. En su interior, alberga un magnífico coro, el retablo mayor, la Capilla Mozárabe y la sacristía, que guarda obras de El Greco y Goya entre otros. Su arquitectura y decoración reflejan una rica fusión de influencias cristianas y mudéjares. Un espectáculo, es la segunda más grande después de la de Sevilla.
La ruta llega hasta aquí. Luego podéis callejear y visitar un montón de monumentos más. Por poner una lista: Las Cuevas de Hércules, Termas Romanas, Mezquita del Cristo de la luz, las diferentes puertas de la ciudad como la de Bisagra, Sol, etcétera.
Más info
Como veis un montón de cosas que dan para más de un día. Así pues, otra visita cuando podáis. No nombro el Alcázar porque no me parece muy interesante ni histórica ni arquitectónicamente. Me parece un edificio feo que hace apología del franquismo. Alberga un museo del ejército. Esas contradicciones de la sociedad.
Bueno, os dejo unos links para que investiguéis un poco más.