3 lugares para visitar en la provincia de Esmeraldas.
Este fin de semana pintaba gris, decidí ir a la playa en busca de calor, a Esmeraldas, en la costa siempre hay buena temperatura, no tenía la esperanza de ver el Sol pero allá que fui. De nuevo a la Ruta del Spondylus. Tuve suerte después de año y medio en Ecuador, es la primera vez que disfruto de un día soleado de playa.
Como no conocía la provincia de Esmeraldas, escogí Tonsupa, Atacames. Un destino muy visitado por los quiteños.
Cómo llegar a Esmeraldas.
Para llegar a Tonsupa podemos coger varias rutas, las más comunes son dos aunque todas llevan a Esmeraldas. Una por la misma vía para llegar Mompiche, pero siguiendo por la E20, sin desviarse, hasta Esmeraldas, o bien, a través de la carretera que pasa por Mindo y Puerto Quito, un lugar a mitad del camino bien surtido de buenos restaurantes. Paramos a la ida y a la vuelta. Un buen lugar. Esta vía es desde Quito pero si has seguido la Ruta del Spondylus llegarás por la Troncal del Pacífico o Ruta del Spondylus o Ruta del Sol, tres nombres para la misma carretera.
Tonsupa.
Nuestro destino es Tonsupa, una pequeña parroquia rural junto a Atacames en la provincia de Esmeraldas. Su playa es más tranquila que la de Atacames y dispone de los mismos servicios. Junto al malecón o paseo marítimo hay chiringuitos con música hasta altas horas de la noche.
Nuestro hotel, Puerto Gaviota, estaba hacia el norte, una zona más tranquila. Cerca de la playa, no en primera línea. Pero sí con servicios en la playa. Limpio y con un buen restaurante, comimos muy bien, piscina y yacusi. Esta zona de playa es muy tranquila, no como la del malecón.
Tumbado en la playa, pude ver como vendedores de todo tipo de cosas pasan ofreciendo sus productos y servicios. Comida, masajes, bebida, gafas, ropa… Lo que se os ocurra, lo podéis conseguir sin mucho esfuerzo.
El agua estaba calentita, al igual que el día. El baño fue estupendo, la playa es tranquila y sin resaca, ni corrientes, al menos ese fin de semana, el penúltimo fin de semana de febrero. Dicen que se puede hacer snorkel y buceo en el norte de la playa, yo no lo vi claro, hay mucha arena.
Las actividades acuáticas junto con los chiringuitos son el reclamo principal, todas se reservan en el malecón, no hay empresas en el norte para hacer esas actividades.
En Tonsupa el transporte más popular son los motocarros, cuestan 0,50 USD por persona por el día y 1 USD por la noche, esto cuando te llevan por la población. Si quieres ir a otros lugares más alejados, toca negociar.
Atacames, Esmeraldas.
Atacames es una población con mucha vida, altos edificios una enorme playa llena de actividades acuáticas. Es una de las playas más cercanas a Quito y eso se nota. Hay mucha gente y, según los lugareños, no es un lugar muy seguro. Está lleno de personas que llegan allí a divertirse, y ya se sabe, donde hay mucha acumulación de gente hay que tener cuidado.
Los espigones rompen la armonía de la costa y dan a la cala un aspecto extraño que contrasta con los acantilados que la rodean.
Siguiendo hacia el sur, desde la Ruta del Spondylus, podemos acceder al mirador llamado “Peñón del Suicida”. Un gran promontorio al final de la playa de Atacames, en lo alto un mirador, con vistas de las playas de Atacames y Tonsupa.y el pueblo de Sua, que no tiene gran interés salvo su situación en una pequeña cala llena de rompeolas para evitar que el fuerte oleaje destruya la población.
Desde el mirador del “Peñón del Suicida” parten un par de caminos que llevan a las faldas del peñón, miradores más pequeños rodeados de vegetación, más fresquitos.
Antes de llegar al mirador a la derecha, hay un faro. Siempre con vistas magníficas de la playa de Atacames y Tonsupa.
En el mirador, muy frecuentado por las personas que visitan Atacames, hay muchos puestos con refrescos. El calor se nota bastante, sobretodo en días soleados. El agua de coco sienta muy bien. 1,50 USD
Casablanca, Same.
Siguiendo hacia el sur por la Ruta del Spondylus llegamos a Same, una pequeña población llena de infraestructuras. Casitas blancas, con puertas y ventanas azules y marrones que recuerdan a las costas griegas o españolas. La más importante de todas estas instalaciones es Casablanca.
Es un placer ver todo tan cuidado y organizado. Para entrar a la urbanización solo hay que pedirle paso al guardia de la entrada. Un parking público en la misma urbanización os permite dejar el coche con un fácil acceso a la playa. 2 USD. Un hotel y un club de golf completan el complejo.
Una vez en la playa, hay un par de chiringuitos que dan servicio principalmente a las personas que se alojan en las urbanizaciones cercanas. La playa tiene 5 kilómetros, el malecón queda lejos de esta urbanización pero se puede llegar en coche. No llegué hasta allí.
Desde la parte norte de la playa se pueden ver los chiringuitos del malecón de Same, una zona menos exclusiva pero con más ambiente.
Intentamos ver el atardecer desde los chiringuitos de la urbanización, fue imposible, las traicioneras nubes que se habían escondido por el día llegaron de golpe justo antes de la puesta de sol. Nos quedamos hasta ver las estrellas.
En todos estos destinos se pueden ver ballenas desde junio a octubre una opción interesante para los amantes de la naturaleza.